Cacao 90% puro deseo

Cacao al 90% es puro deseo

Un bocado de cacao al 90% es puro deseo para cualquiera, ese toque amargo balanceado y suave que se va derritiendo en boca poco a poco. Sabor puro que nos traslada a un momento de placer, sentimiento poco comparable a cualquier otra cosa y, por supuesto, no apto para todos los paladares. Ese intenso sabor resulta incómodo para algunos pero, como indica su propio nombre científico, para otros es el “alimento de los dioses”.

Encontramos el origen en la exótica selva del Amazonas y se extendió hasta Mesoamérica por las rutas comerciales que mantenían las diferentes civilizaciones. Los mayas y aztecas comenzaron a cultivarlo más de 2.500 años atrás y bautizaron al cacaotero como Theobroma, significando “Theos” dios y “broma” alimento. Al haba de cacao la llamaban “Kakawa” y a la bebida amarga y algo picante por las especias que le añadían le llamaban “Nautl xocoatl” traducido literalmente como “agua amarga”, la cual consumían durante sus celebraciones religiosas. Tan valioso era, que incluso lo usaban como moneda.

Cacao 90% puro deseo Camino Mitad

Con el paso del tiempo, hemos sabido apreciar el amargor tan característico del cacao y sus beneficios. Tomar una onza de chocolate al día (a poder ser con el máximo cacao que tu paladar pueda soportar) es beneficioso para la salud y, aunque parezca mentira, es vital para el estado de ánimo. Si lo acompañas de una copa de nuestro Crianza, disfrutarás al máximo una combinación especial de sabores y tu día mejorará, ¡os lo podemos asegurar!. 

Nuestra variedad de chocolates es muy amplia, y entre los productos que ofrecemos, luce con orgullo un cacao al 90% en una de las etiquetas, siendo extrafino para mantener esa nota crujiente, elaborado artesanalmente, con un toque amargo equilibrado y sin ser ácido gracias a su proceso de conchado. Además de aportarnos placer, el cacao también tiene propiedades antioxidantes muy beneficiosas para nuestra salud favoreciendo la función cardiovascular y añadiendo vitaminas y minerales (contiene fósforo, magnesio, hierro y calcio entre otros) a nuestra dieta. 

Nuestros chocolates no son perfectos en forma y es eso lo que precisamente los hace auténticos, porque lo artesanal sabe mejor.

Fotografías ©Andrea Invierno